Acogida familiar

La acogida familiar para personas mayores es una solución poco conocida, pero que supone una buena alternativa a la necesidad de dejar su domicilio, ya que permite permanecer cerca de su entorno local.

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Esta forma de vivienda compartida con una familia permite romper el aislamiento y responder a una necesidad que, a menudo, se debe más a la inseguridad de la soledad que a un problema de pérdida de autonomía. Aun así, también encontramos a personas mayores con problemas para desempeñar las actividades diarias o con movilidad reducida. En estos casos, la opción de la acogida familiar puede ser una buena alternativa para retrasar al máximo el ingreso en una residencia.

¿Cuáles son los requisitos para ser una familia de acogida para personas mayores?

Las familias de acogida deben tener unas características especiales, principalmente empatía, y deben actuar siempre en beneficio de las personas mayores. Las familias se comprometen a atender a las personas mayores en aquello que necesiten.

Los requisitos básicos son:

- tener una buena salud y no tener impedimentos para atender las tareas domésticas.

- disponer de unos recursos económicos suficientes para sus propias necesidades.

- que sea fácil acceder a la vivienda y que no haya barreras arquitectónicas ni obstáculos. Por supuesto, deberá contar con condiciones higiénicas y de salubridad. Por lo demás, no importa que se encuentre en la ciudad o en zonas rurales.

¿Cuáles son los requisitos para acceder al acogimiento familiar?

Los requisitos básicos para acceder al programa de acogida familiar son:

• Estar empadronado en la comunidad autónoma donde se solicita la acogida.

• Haber cumplido 65 años.

• Cumplir con diferentes requisitos económicos (según la declaración de la renta).

• Acreditar que se necesita la ayuda del programa de acogida con un informe de los Servicios Sociales o tener un grado de dependencia según el baremo vigente.

• No presentar problemas graves de trastornos cognitivos que imposibiliten una convivencia normal.

 ¿Cómo funciona el alojamiento de las personas mayores en familia de acogida?

La acogida familiar permite que las personas mayores se alojen durante un período temporal (por ejemplo, para que descanse la persona que les cuida) o bien de manera indefinida.

Este tipo de alojamiento permite una cierta flexibilidad según lo acordado entre la familia de acogida y la persona mayor o sus cuidadores.

¿Cuáles son las prestaciones y servicios garantizados por la familia de acogida?

La familia debe asistir a la persona mayor en tareas diarias como el aseo personal, las comidas, hacer un seguimiento de la medicación, etc. Además, se comprometen a ofrecerle actividades, salidas y cualquier ayuda necesaria, como acompañarle al médico.

La familia de acogida debe integrar a la persona mayor en la vida familiar para asegurar su salud y su equilibrio.

¿Cuál es el coste de un alojamiento en familia de acogida?

La persona mayor beneficiaria del programa de acogimiento familiar percibirá una ayuda económica para que pueda participar en los gastos generados en el hogar de acogida.

Como ejemplo, en 2019, el importe máximo mensual en la Comunidad de Madrid fue de 753 euros.

El importe final se determina según los ingresos brutos mensuales del beneficiario.

Como cada comunidad autónoma tiene su propio programa de acogida familiar, le aconsejamos acudir a los Servicios Sociales de su municipio para obtener más información.

Además, a la hora de elegir este tipo de alojamiento, es imprescindible recordar que la persona mayor no puede tener ningún parentesco con la familia de acogida.